martes, 8 de abril de 2008

El Poder de una Fotografía


Muchos de vosotros habréis visto esta fotografía de Eddie Adams, por la que ganó un premio Pulitzer y que se considera la foto más famosa de la guerra de Vietnam. En ella se ve al General Nguyen Ngoc Loan ejecutando a un indefenso prisionero Vietcong ante la mirada implacable de la cámara de Eddie Adams. Fué uno de los catalizadores de la corriente de opinión contraria a la guerra de Vietnam en EE.UU. y por tanto un éxito para el fotógrafo.

Lo que es curioso son las declaraciones del mismo autor de la instantanea, quien asegura que "desearía no haber tomado jamás esa fotografía"

"El general mató al vietcong, y yo maté al general con mi cámara. Las fotografías son el arma más poderosa del mundo. La gente se las cree, pero las fotografías mienten, incluso sin manipulación. Sólo son medias verdades. Lo que la fotografía no contaba era: "¿Qué harías si fueras el general en aquel momento, en aquel lugar, aquel día caluroso, y hubieras pillado al malo que había hecho saltar por los aires uno, dos o tres soldados americanos"
Eddie Adams

Poco antes de esta fotografía, el indefenso Vietcong había matado a varios de los hombres de Loan con una explosión, rompiendo una tregua pactada durante la festividad de Tet. Al ver la matanza y después de capturar al culpable, Loan disparó arruinando su imagen y su reputación desde ese mismo momento en el que una camará le apuntó a él. Loan resultó ser un hombre querido y respetado entre sus hombres, inclusó colaboró activamente en la construcción de hospitales en el Sur de Vietnam. Nada de eso importó a su regreso a los EE.UU. con una imagen destrozada. Adams siguió en contacto con él hasta los últimos días, cuando murió de cáncer. Sólo pudo enviar flores a su funeral pidiendo perdón una vez más por tomar aquella fotografía, y según sus palabras, con lágrimas en los ojos.